2. Despéjate

La productividad se alimenta a través de los estímulos que le damos a la mente. Si trabajas de lunes a viernes y utilizas el fin de semana para seguir trabajando, habrá un minuto en que tu cabeza se quedará sin ideas e inspiración, y además entrarás en un colapso nervioso de estrés (estoy exagerando, pero sí estarás estresado y eso nublará tus habilidades). Date tiempo para tus hobbies, para hacer lo que te gusta, para relajarte y recargarte de energías.

3. Haz los quehaceres

Tranquilo, no te estoy pidiendo que uses todo tu domingo en latosos quehaceres, sino que te tomes solo una hora para esto. Usa solo una hora de tu día para alcanzar lo máximo posible lo más rápido posible. Si te enfocas esta hora y trabajas duro, de seguro podrás disfrutar de sobremanera tu domingo. Solo de saber que hiciste tu cama, lavaste tu ropa, ordenaste y que la comida está lista, tu mente te permitirá descansar y no sentirte culpable o que estás perdiendo un día.

4. Duerme una siesta

A pesar de que muchos la consideran como un signo de pereza, expertos aseguran que las siestas pueden en realidad ayudar a aumentar la productividad, la capacidad creativa, la imaginación, el rendimiento, combate la ansiedad y el estrés y aumenta la sensación de bienestar. No es necesario dormir 3 horas, con 20 o 30 minutos basta. Toma un libro, ponte en tu sofá o en una hamaca y déjate caer en los brazos de Morfeo por unos minutos.

5. Ejercítate

30 minutos, no te pido más, pero este es el comienzo de un domingo productivo y bien aprovechado. En la semana es difícil hacerse el tiempo para moverse, por lo que este día es perfecto para hacerlo. Ejercitarte no solo te ayudará a ser más productiva el resto del día, sino que te hará sentirte increíblemente bien y hará que comiences tu semana mucho más renovado.